EUROPA
PRESS
5 mayo
2022
Antioxidantes
contra la demencia. ¿cuáles son los que la ciencia
recomienda?
Las personas con mayores niveles de
antioxidantes en la sangre pueden tener menos probabilidades de desarrollar
demencia, según un estudio publicado en la edición online de 'Neurology', la revista médica de la Academia Americana de
Neurología.
El estudio descubrió que las personas con los niveles más
altos de los antioxidantes luteína y zeaxantina y betacriptoxantina en su
sangre tenían menos probabilidades de desarrollar demencia décadas después que
las personas con niveles más bajos de los antioxidantes.
La luteína y la zeaxantina se encuentran en verduras de hoja
verde como la col rizada, las espinacas, el brócoli y los guisantes. La betacriptoxantina
se encuentra en frutas como las naranjas, la papaya,
las mandarinas y los caquis.
"Prolongar el funcionamiento cognitivo de las personas
es un importante reto para la salud pública --afirma la autora del estudio, May
A. Beydoun, doctora en Filosofía y Letras, del
Instituto Nacional del Envejecimiento de los Institutos Nacionales de la Salud
de Estados Unidos--. Los antioxidantes pueden ayudar a proteger el cerebro del
estrés oxidativo, que puede causar daño celular. Se necesitan más estudios para
comprobar si la adición de estos antioxidantes puede ayudar a proteger el
cerebro de la demencia", añade.
En el estudio participaron 7.283 personas que tenían al menos 45 años al inicio del estudio. Se les hizo un
examen físico, una entrevista y análisis de sangre para determinar los niveles
de antioxidantes al comienzo del estudio. A continuación, se les hizo un seguimiento
durante una media de 16 años para ver quiénes desarrollaban demencia.
Los participantes se dividieron en tres grupos en función de
sus niveles de antioxidantes en la sangre. Las personas con las mayores
cantidades de luteína y zeaxantina eran menos propensas a desarrollar demencia
que las que tenían niveles más bajos.
Cada aumento de la desviación estándar en los niveles de
luteína y zeaxantina, aproximadamente 15,4 micromoles/litro, se asoció con una
disminución del 7% del riesgo de demencia. En el caso de la betacriptoxantina,
cada desviación estándar de los niveles, aproximadamente 8,6 micromoles/litro,
se asoció con una reducción del 14% del riesgo de demencia.
"Es importante señalar que el efecto de estos
antioxidantes sobre el riesgo de demencia se redujo un poco cuando tuvimos en
cuenta otros factores como la educación, los ingresos y la actividad física,
por lo que es posible que esos factores ayuden a explicar la relación entre los
niveles de antioxidantes y la demencia", apunta Beydoun.